Los 4 mejores templos de Atenas
¡Hola viajer@! Mi nombre es Juan, soy un joven Ingeniero Mecánico que nunca llegó a ejercer como tal. Enamorado de los viajes y de conocer nuevos lugares, mi camino me llevó a la mágica ciudad de Atenas, donde resido actualmente y me dedico a hacer free tours.
Antes de nada quería darle las gracias a Gonzalo por permitirme participar como invitado en su blog, espero que este artículo sea de utilidad a todas las personas que están visitando visitar el país heleno:En este artículo te traigo una recopilación de los mejores templos de la capital griega, 3 de ellos se encuentran en la Acrópolis de Atenas y el otro está dedicado a un dios que de seguro conoces también bien…¡Disfruta del contenido!
Los 4 mejores templos de Atenas
Los 4 mejores templos de Atenas
Atenas es el hogar de casi todos los dioses de la mitología griega, por tanto, no es de extrañar que aquí nos podamos encontrar con los templos de nuestros dioses favoritos.
Buenas querido viajero:
Ya seas alguien que esté planeando su viaje a la capital griega o un interesado de la mitología, te doy la bienvenida a este artículo donde listamos y explicamos los mejores (más importantes) templos situados en Atenas.
El Partenón de Atenas
Situado en lo más alto de la Acrópolis, el Partenón es el emblema de Atenas, además de un símbolo de la democracia y de la grandeza de esta ciudad estado durante la antigua Grecia.
El Partenón, como no podía ser de otra manera, está dedicado a la diosa de la sabiduría, de la estrategia militar y también protectora de la ciudad a la que le dio su nombre: Atenea.
Se trata de un templo de orden dórico con unas dimensiones impresionantes, especialmente para su época. Cabe destacar también que los arquitectos que lo diseñaron (Calicrates e Ictinos) respetaron la famosísima proporción áurea. Además de ello y con objetivo de compensar la mala percepción del ojo humano cuando este enfoca objetos demasiado grandes, se hicieron muchas modificaciones en la arquitectura de este templo.
Dicho de otra manera más simple, aunque no más fácil de entender:
Muchos lados y columnas del Partenón se construyeron curvados para que nuestros ojos los vean rectos, ya que de otra manera nuestra mente los “deformaría” y este templo de la Acrópolis no se vería perfecto.
El Partenón, como no podía ser de otra manera, está dedicado a la diosa de la sabiduría, de la estrategia militar y también protectora de la ciudad a la que le dio su nombre: Atenea.
Se trata de un templo de orden dórico con unas dimensiones impresionantes, especialmente para su época. Cabe destacar también que los arquitectos que lo diseñaron (Calicrates e Ictinos) respetaron la famosísima proporción áurea. Además de ello y con objetivo de compensar la mala percepción del ojo humano cuando este enfoca objetos demasiado grandes, se hicieron muchas modificaciones en la arquitectura de este templo.
Dicho de otra manera más simple, aunque no más fácil de entender:
Muchos lados y columnas del Partenón se construyeron curvados para que nuestros ojos los vean rectos, ya que de otra manera nuestra mente los “deformaría” y este templo de la Acrópolis no se vería perfecto.
Erecteion
Vamos con otro templo que también se encuentra en la Acrópolis de Atenas. Es aquí donde podemos encontrarnos con las famosísimas cariátides, que se tratan de unas columnas de mármol con forma de mujer de lo más curiosas.
Además, este es uno de los templos más importantes de la mitología griega, puesto que está dedicado a: Atenea, Poseidón y Erecteo.
Ya hemos comentado que Atenea era la diosa protectora de la ciudad. Por otro lado, su tío Poseidon era el dios de los mares y de los terremotos. ¿Y qué hay de Erecteo?
Se cree que Erecteo podría ser el primer rey de Atenas, unos 5.000 años atrás (que se dice rápido). Según las creencias ancestrales, se trataba de un ser mitad hombre y mitad serpiente nacido de la propia tierra. Además era el hijo adoptivo de Atenea, por supuesto, un rey debía de tener un origen “divino”…
Además, este es uno de los templos más importantes de la mitología griega, puesto que está dedicado a: Atenea, Poseidón y Erecteo.
Ya hemos comentado que Atenea era la diosa protectora de la ciudad. Por otro lado, su tío Poseidon era el dios de los mares y de los terremotos. ¿Y qué hay de Erecteo?
Se cree que Erecteo podría ser el primer rey de Atenas, unos 5.000 años atrás (que se dice rápido). Según las creencias ancestrales, se trataba de un ser mitad hombre y mitad serpiente nacido de la propia tierra. Además era el hijo adoptivo de Atenea, por supuesto, un rey debía de tener un origen “divino”…
Templo de Atenea – Niké
Este es el monumento menos conocido, pero no menos importante, que forma parte de nuestra lista. El templo de Atenea – Niké está situado en una torre de los Propileos (la entrada a la fortificación de la Acrópolis de Atenas).
Se trata de un templo pequeño pero con mucha relevancia histórica, cuando te explique el origen de su nombre seguro que lo entenderás:
Nuestro contexto es la segunda guerra médica, en el siglo V a.C. Quizás este episodio de la historia te suene de haberlo visto en la segunda película de «300»…
El gran imperio Persa, comandado por el rey Jerjes, tenía como objetivo conquistar el mundo heleno. Todo apuntaba a que iban por el buen camino, dado que incluso la gran ciudad estado de Atenas había sido ya invadida (y su respectiva Acrópolis quemada y destruida). Sin embargo una coalición de griegos, siguiendo las órdenes del general ateniense Temistocles, enfrentaron a los persas en el estrecho de Salamina. Fue esta batalla naval la que, por primera vez, se saldó con una derrota para el invasor, teniendo este que replantearse su incursión en el mundo heleno y finalmente retroceder.
En conclusión, el resultado de esta batalla fue un punto de inflexión en la guerra. Además, se trataba de una situación tremendamente difícil para los helenos, debido a su gran desventaja numérica. Dice la leyenda, que en esa misma mañana, antes de enfrentar al imperio persa, los soldados helenos vieron como una lechuza sobrevolaba el estrecho donde la batalla iba a tener lugar.
¿Qué tiene que ver una lechuza en todo esto? ¿No nos estamos yendo por las ramas?
Pues solo un poco. Resulta que la lechuza es el símbolo de Atenea, diosa de la sabiduría y de la ESTRATEGIA MILITAR, además de protectora de la ciudad de Atenas. Este hecho fue interpretado por los helenos como una señal de que Atenea les estaba acompañando ese día, l lo que… ¡No podían perder!
A partir de ese momento a Atenea se le puso el renombre o epíteto de «Niké», que significa «victoriosa». También hace referencia a la diosa «Niké», la cual suele ser representada como un ser alado.
Con el objetivo de conmemorar esta victoria que cambió el curso de la historia, se construyó este templo en lo alto de la Acrópolis de Atenas. Además, y fíjate en esto cuando visites el recinto arqueológico, el templo de Atenea Niké está orientado al mencionado estrecho de Salamina…
Se trata de un templo pequeño pero con mucha relevancia histórica, cuando te explique el origen de su nombre seguro que lo entenderás:
Nuestro contexto es la segunda guerra médica, en el siglo V a.C. Quizás este episodio de la historia te suene de haberlo visto en la segunda película de «300»…
El gran imperio Persa, comandado por el rey Jerjes, tenía como objetivo conquistar el mundo heleno. Todo apuntaba a que iban por el buen camino, dado que incluso la gran ciudad estado de Atenas había sido ya invadida (y su respectiva Acrópolis quemada y destruida). Sin embargo una coalición de griegos, siguiendo las órdenes del general ateniense Temistocles, enfrentaron a los persas en el estrecho de Salamina. Fue esta batalla naval la que, por primera vez, se saldó con una derrota para el invasor, teniendo este que replantearse su incursión en el mundo heleno y finalmente retroceder.
En conclusión, el resultado de esta batalla fue un punto de inflexión en la guerra. Además, se trataba de una situación tremendamente difícil para los helenos, debido a su gran desventaja numérica. Dice la leyenda, que en esa misma mañana, antes de enfrentar al imperio persa, los soldados helenos vieron como una lechuza sobrevolaba el estrecho donde la batalla iba a tener lugar.
¿Qué tiene que ver una lechuza en todo esto? ¿No nos estamos yendo por las ramas?
Pues solo un poco. Resulta que la lechuza es el símbolo de Atenea, diosa de la sabiduría y de la ESTRATEGIA MILITAR, además de protectora de la ciudad de Atenas. Este hecho fue interpretado por los helenos como una señal de que Atenea les estaba acompañando ese día, l lo que… ¡No podían perder!
A partir de ese momento a Atenea se le puso el renombre o epíteto de «Niké», que significa «victoriosa». También hace referencia a la diosa «Niké», la cual suele ser representada como un ser alado.
Con el objetivo de conmemorar esta victoria que cambió el curso de la historia, se construyó este templo en lo alto de la Acrópolis de Atenas. Además, y fíjate en esto cuando visites el recinto arqueológico, el templo de Atenea Niké está orientado al mencionado estrecho de Salamina…
Templo de Zeus
Como no podía ser de otra manera, teníamos que incluir este recinto arqueológico en nuestra lista de mejores templos de Atenas. Y aunque este NO se encuentre en la roca sagrada de la Acrópolis, se trata de una visita imprescindible:
Zeus era el rey de los dioses del Olimpo, el cual poseía el poder del rayo, junto con el cual (y mucha más ayuda) había conseguido destronar al titán de su padre (Cronos).
Este templo fue el más grande de su época, así es, incluso más grande que el Partenón de la Acrópolis. Tenía la impresionante cantidad de 104 columnas de orden dórico, distribuidas en 96 metros de largo y 40 metros de ancho.
Semejante obra maestra tardaría casi 700 años en ser realizada; desde el siglo VI a.C. cuando se empezó por orden del tirano ateniense Pisístrato, hasta que en el siglo II d.C la acabaría el emperador romano Adriano.
Cabe aclarar que su construcción estuvo parada durante varios siglos, ya que existían otros temas que se llevaban toda la atención y recursos (la guerra del Peloponeso, una pandemia, la pobreza…).
Además y según Aristóteles, estas obras tan grandes eran utilizadas por algunos tiranos (o mandatarios que no hacían bien su trabajo) para mantener al pueblo distraído y que éste no se percatara de su mala gestión…
Zeus era el rey de los dioses del Olimpo, el cual poseía el poder del rayo, junto con el cual (y mucha más ayuda) había conseguido destronar al titán de su padre (Cronos).
Este templo fue el más grande de su época, así es, incluso más grande que el Partenón de la Acrópolis. Tenía la impresionante cantidad de 104 columnas de orden dórico, distribuidas en 96 metros de largo y 40 metros de ancho.
Semejante obra maestra tardaría casi 700 años en ser realizada; desde el siglo VI a.C. cuando se empezó por orden del tirano ateniense Pisístrato, hasta que en el siglo II d.C la acabaría el emperador romano Adriano.
Cabe aclarar que su construcción estuvo parada durante varios siglos, ya que existían otros temas que se llevaban toda la atención y recursos (la guerra del Peloponeso, una pandemia, la pobreza…).
Además y según Aristóteles, estas obras tan grandes eran utilizadas por algunos tiranos (o mandatarios que no hacían bien su trabajo) para mantener al pueblo distraído y que éste no se percatara de su mala gestión…
Espero que hayan disfrutado de este viaje de Los 4 mejores templos de Atenas
Los 4 mejores templos de Atenas
Si te gustó este relato, puedes leer también la de Que hacer en Edimburgo en 3 días
Templo del Erecteion
Acropolis GonTraveler
Templo de Atenea Niké
Templo de Zeus
Recinto arqueológico de la Acrópolis de Atenas
Invitado:
Juan Taracena
Instagram: @foundingreece
Web: https://acropolisdeatenas.info/
