Soy Mar, un gusto.
Espero que estas líneas no sólo cuenten mi historia, sino que te ayuden a ver que en la vida las oportunidades se prestan para mí y para vos de igual manera. La cosa es tenerlo presente, porque si nos quedamos estancados pensando en qué pasará, no vamos a ser capaces de hacer que pase.

Una historia de caminos forjada con sueños

Mi historia comienza hace muchos años. No te voy a aburrir leyendo todo eso. Te voy a resumir algunas cosas: mi infancia y adolescencia no fueron “lo mejor” que le puede pasar a alguien. Pasamos momentos difíciles con mi familia, a veces sin tener qué comer y en otras ocasiones, me miraba al espejo y no entendía quién era.
Sin embargo, el estudio siempre fue algo que me encantó, a pesar de todas las dificultades que se presentaban en mi vida, así que le puse mucha garra, sabía que era algo que algún día me iba a llevar lejos.
Paralelamente, siempre miraba fotografías viejas de mis abuelos, pensaba lo mágico que era guardar esos recuerdos y ahí se empezó a formar algo en mí…

Una de sus primeras fotografías. Fridha

Comencé con fotografías sin saber qué rumbo tomar. Tomé clases. Hice un curso completo. De repente, me di cuenta ¡Me encantan los bebés! ¿Por qué no intentarlo? Comencé con la beba de una compañera con la que cursábamos la diplomatura como Sr. Community Manager. De ahí en adelante, abrí mis redes sociales para iniciar en este mundo de la fotografía de bebés y futuras mamás, nace Sunnies Fotografía.

Roma: modelo oficial de mi estudio

Trabajaba 9 horas de corrido en la empresa. Luego daba clases de Marketing en la UBA (sí, empecé también con esto y lo sé, mi vida parece una montaña de cosas jaja). Luego los fines de semana, hacía fotografía de bebés, porque claro, no tenía estudio, sólo mi cámara.

Tranquera y cielo pintado de Aluminé, Neuquén, Patagonia argentina.

A fines del 2018, me propongo a hacer un viaje. Decido el destino: nuestra querida Patagonia argentina. Anhelaba ver las montañas, los lagos, las estrellas explotando en su máxima expresión. Todo era el deseo de fotografiar esos momentos. Así que Neuquén fue mi destino, más precisamente, Aluminé.
También tuve la dicha de conocer Villa Pehuenia, San Martín de los Andes y el sur de Chile, como Villarrica, Pucón y Temuco.

Volcán Villarrica, Pucón, Chile.

Volví con otra cabeza. Mi alma había detectado que era necesario cambiar el rumbo de mi vida y no me dejó otra opción que hacerlo porque en febrero del 2019, tengo un pequeño accidente en la vía pública que me contracturó la nuca y me dejó de licencia laboral durante 6 meses.
“¿Y ahora qué hago?”, me dije. Bueno, agarré mis cosas y viajé otra vez a Aluminé, para relajarme y encontrarme. Abrí mi cuenta de Instagram para compartir los paisajes Imagine My World estás obviamente invitado a visitarla.

Muelle de Villa Pehuenia, Neuquén, Patagonia argentina.

Entre una cosa y otra, conozco al Secretario de Turismo de Aluminé. Y a personas grandiosas que siempre llevo presente. Ellos fueron parte de un nuevo comienzo. Necesitaban una estratega de marketing digital para promover las redes sociales del turismo y además, alguien que cubriera los eventos con fotografías. Empecé con ellos, mientras seguía de licencia en mi trabajo fijo. No te puedo explicar mi nivel mental en ese momento de mi vida, todo estaba yendo tan rápido, las cosas se iban dando de tal forma que necesitaba pensar mejor todo.

Ñorquinco, Parque Nacional Lanín, Aluminé.

Empecé a ahorrar, compré lo necesario para tener un estudio de verdad, flashes, soportes, lonas para fondos de fantasía, pisos, ropita de bebé ¡Y ufff, qué largo camino me quedaba por recorrer, recién empezaba con lo mínimo!

Mi primer estudio de fotografía.

A mediados de 2019 renuncio a mi empleo formal y termino contrato con la Secretaría de Turismo de Aluminé. Regreso a Buenos Aires y ya tenía tomada la decisión, iba a dedicarme a la fotografía y el marketing de manera autónoma.
Comienzo a trabajar con una agencia de marketing con la que estoy hasta el día de hoy.

San Martín de los Andes, Neuquén, Patagonia argentina.

Crecí tanto en cuatro años que nunca pierdo la oportunidad de decirle a todo el mundo lo importante que es seguir sus sueños, por más cliché que suene.
Porque realmente el alma sabe cómo y dónde llevarnos. Esos pálpitos que uno a veces siente y que apaga, diciéndoles como lo hacía yo: “NO”, pueden ser el camino a tu felicidad.
Hoy me dedico a la fotografía infantil y futuras mamás, además de viajar por distintos destinos, sobre todo la Patagonia que tanto amo y fotografiar cada momento que se me cruza por los ojos. Soy Lic. en Marketing y profesora de mucha gente que sueña como yo. Porque es así, los caminos se fueron forjando con sueños y hoy me encuentro en una posición distinta a la de aquellos días en los que no sabía ni quién era.
Sé que fueron estos largos caminos los que formaron la persona que soy hoy, también sé que me esperan muchos nuevos destinos, pero disfruto el proceso del día a día.

Caminos de Villa Pehuenia, Neuquén, Patagonia argentina.

Así que animate, equivocate, volvelo a intentar, no bajes los brazos, que ni un país, ni un trabajo, ni tu situación actual pueden frenar el talento que tenés adentro. Tu único limitante sos vos.
Las cámaras fotográficas son una máquina del tiempo y con ellas se puede volver, siempre que lo desees, a revivir los momentos más importantes de tu vida.

San Rafael, Mendoza. Noche estrellada.

“No hay hombre valiente que nunca haya caminado cien kilómetros. Si quieres saber quién eres, camina hasta que no haya nadie que sepa tu nombre.
Viajar nos pone en nuestro sitio, nos enseña más que ningún maestro, es amargo como una medicina, cruel como un espejo.
Un largo tramo de camino te enseñará más sobre ti mismo que cien años de silenciosa introspección.»

– Kvothe, El nombre del viento de Patrick Rothfuss.

Si les gustó este relato, les dejo una mini historia que un tiempo atrás escribió Mela en Madrid…»Historia a mi Moreno«

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